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jueves, 2 de mayo de 2019

artículos en proceso.

"[...] la distancia máxima entre un ser y su propio cuerpo puede aumentar exponencialmente a diario sino se tiene presente que los órganos que se ocupan de regular la circulación armoniosa entre los sistemas tangibles y los etéreos, pueden ser agotados cuando la dosis de afecto diario disminuye progresivamente [...]"

Cito: "[...] la disminución progresiva de estas dosis —por lo regular, considerada como un efecto natural en el desarrollo normal de la sociabilidad— produce síntomas perceptibles únicamente para el individuo. Por ejemplo, las voces de la psiquis que complementan los procesos de racionalización diaria, adquieren nuevas formas y protagonismos debido a un crecimiento notable en el volumen, la participación y la injerencia de dichas voces en las actividades, hábitos y espacios en los que regularmente el cuerpo se movía automáticamente, es decir, sin necesidad de hacer reflexiones profundas, ni llevar a cabo ecuaciones de emotividad complejas."

Los estudios publicados en torno al creciente aumento de esta sintomatología en la población, han revelado que la mayoría, jóvenes entre las edades de 12 - 24 años, han presentado indicios leves de llanto prematuro y auto-pena, la tristeza, dicen ellos, ocupa su campo de visión y les dificulta ver en días soleados y les imposibilita sonreír con sinceridad cuando caminan solos en la calle durante el día.

Las autoridades responsables no han ofrecido declaraciones que permitan conocer en detalle la gravedad de la situación. Aun así, algunos funcionarios, a quienes mantendremos bajo anonimato, aseguran que los números ascienden a cifras epidémicas.

Se dice que los jóvenes contagiados se agrupan en secreto en terrenos soleados en horario escolar para sudar el llanto en silencia.

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