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lunes, 13 de mayo de 2019

nombre propio

En general, hemos visto un cambio palpable en el tamaño de las manos de los entrevistados. Los primero síntomas a pocos días del contagio son los siguientes: sudoración detrás las orejas, aumento considerable en los dedos de los pies y recuperación involuntaria de la empatía. Lo chicos, por lo regular, comienzan por verse en los zapatazos de los otro e intentan como primer reflejo desatárselos, luego cuándo al fin realizan que los de zapatos de los que intentan salir eran también lo de ellos, comienzan sentir los dolores de sus parientes más cercanos. Lloran por algunos días y salen a caminar sin rumbo, por lo regular todxs, regresan de noche, agotados y con rostro de desconocido. A la mañana siguiente el último síntoma se manifiesta con un impulso de solidaridad; como una convulsión hacia el prójimo que les impide responder cuando se les llama por su nombre propio.

Y fui plaza un día

Y fui dado a las categorías 
Y me condené en cada una de ellas
Y no entendí el principio de mi violencia
Y fui contra mi
Y me deshice una y otra vez hasta dar con el hueso
Y no quedaron mas que los dientes
Con hambre
Con ira
Con pena
Y me vi llorando en la plaza
Sentado 
Sólo a medianoche


Me vi de lejos
Y estaba viejo
Por dentro
Cansado
Embestido
Atravesado
Por un palo que crecía de la ciudad misma y que no llevaba mi nombre
Me hice víctima el mismo día 
Me vendí por partes
Y sonreí cada vez que me compraron
Y fui feliz en mi mentira por 20 minutos 
Me sentí bien 
Me engañé con calma y con cariño 
Y morí por dentro una vez más de desencanto 
No encontré la costa 
Y seguí andando 
Y me vi otra vez en la misma plaza escuchando a un viejo que me quería contar los milagros de la ciudad 
que él había habitado
Y yo lo oía 
Y le miraba
Y lloraba por dentro de ternura
Y abrazaba al viejo sin que se diera cuenta
Y lo quería 
Y me quedaba allí hasta que el se iba y yo me hacia uno con el piso de la plaza 


otro día más

domingo, 12 de mayo de 2019

huesos limpios

huesos limpios

tengo a dónde ir
fuera de los espacio que he habitado contigo
no me espantará el no verte
no me dolerá perder tus cosas
ni escuchar nuestras canciones

habré desarmado nuestro lugar
las piezas serán parte de otro cuerpo
la ciudad será otra vez mi ciudad
y tu pueblo seguirá siendo tu pueblo
habré sacado mis manos de tus manos
y habré inventado otro aire
tu respiraras el tuyo

yo no me perderé buscándote en otros nombres
sabré reconocerte con calma en cualquier cuerpo
habitaré otra vez mis manos
y mis dolores, serán solamente míos
los tuyos, siempre serán un poco míos también
pero porque yo quiero
no por qué tu me lo pidas

haré otra vez lo que me plazca
leeré más horas de corrido
me mataré a mordiscos
y me enterraré entre sábanas limpias
jugaré a poner las cosas en el orden que yo quiera
y me sentiré importante en mi habitación

en apariencia, seré tranquilamente el mismo
pero adentro, criaré los hijos que nunca tuvimos
y cuando crezcan me olvidaré de ellos

perderé la mirada y los pies
habré andado sobre los jardines que plantamos
miraré hacia adentro y no encontraré nada
no habré perdido nada
todo sonará a huesos limpios

en la casa

en la casa
las cosas son flaquitas
casi transparente
puedo ver a través de ellas
paisajes
vajillas nuevas
a lo vecinos queriéndose como pueden
entregándose lo que tienen
han venido de todas partes
traen cosas de todo tipo
las ordenan en cubículos pequeñitos
como emulándose a si mismos
en el orden que imponen a sus pertenencias
se han clasificado por colores
por usos y por tamaños
se guardan y se olvidan
se comen cuando se encuentran
se guardan
se amoldan a las esquinas de los cajones
le ponen nombre a sus dolores
y lo llaman cada vez que los quieren ver venir
lo reciben durmiendo
se dejan destruir
y se recogen en pedazos por la mañana
se han visto huir de si mismo
se han dejado pistas para encontrarse
y desayunarse acompañados de si mismo
en la mesa
con un platito casi vacía en el que solo caben un pedazo de pan y una galleta
morirán de hambre y lo saben
pero les anima la posibilidad de acabarse lento
de evaporarse dentro de la botella
de gemir con su último suspiro

de quererse acabar


jueves, 2 de mayo de 2019

artículos en proceso.

"[...] la distancia máxima entre un ser y su propio cuerpo puede aumentar exponencialmente a diario sino se tiene presente que los órganos que se ocupan de regular la circulación armoniosa entre los sistemas tangibles y los etéreos, pueden ser agotados cuando la dosis de afecto diario disminuye progresivamente [...]"

Cito: "[...] la disminución progresiva de estas dosis —por lo regular, considerada como un efecto natural en el desarrollo normal de la sociabilidad— produce síntomas perceptibles únicamente para el individuo. Por ejemplo, las voces de la psiquis que complementan los procesos de racionalización diaria, adquieren nuevas formas y protagonismos debido a un crecimiento notable en el volumen, la participación y la injerencia de dichas voces en las actividades, hábitos y espacios en los que regularmente el cuerpo se movía automáticamente, es decir, sin necesidad de hacer reflexiones profundas, ni llevar a cabo ecuaciones de emotividad complejas."

Los estudios publicados en torno al creciente aumento de esta sintomatología en la población, han revelado que la mayoría, jóvenes entre las edades de 12 - 24 años, han presentado indicios leves de llanto prematuro y auto-pena, la tristeza, dicen ellos, ocupa su campo de visión y les dificulta ver en días soleados y les imposibilita sonreír con sinceridad cuando caminan solos en la calle durante el día.

Las autoridades responsables no han ofrecido declaraciones que permitan conocer en detalle la gravedad de la situación. Aun así, algunos funcionarios, a quienes mantendremos bajo anonimato, aseguran que los números ascienden a cifras epidémicas.

Se dice que los jóvenes contagiados se agrupan en secreto en terrenos soleados en horario escolar para sudar el llanto en silencia.

nadie, nunca

nadie
son una familia numerosa
se les ve todo el tiempo salir en las películas 
  de productoras de todos los tamaños  y procedencias
se les ha visto hablar sobre elles mismes y encontrar encanto entre sus pares
se les ha visto cagar en la cocina afeitar al perro forrar las esquinas con        papel de baño
gritarse que se quieren de un edificio al otro
mentirse mirándose a los ojos
hacer fiestas para elles mismes y armarse en revueltas para quemar iglesias con su alegría

les han matado tantas veces
y tantas veces han vuelto, que es imposible confundirles con los protagonistas
han llevado consigo grandes cargas
  roles escenciales
asuntos importantes como:
poemas breves, 
cartas perdidas,
  asuntos incompletos
ganas de fracasar
  padres prematuros
  miedos de todos los tamaños y colores
  miedas también
  prematuras también
  chicos chicos
  servilletas de colores
  vasos y platos de papel para escribirle cartas a los vecinos nuevos
  y maldiciones para escoger, maldichos, malparídos, juegos, condones y  
      fermentos con sabor a sirena
habrá que vérsela entera, estudiársela con calma
abrirse paso entre estudiantes y volverla a estudiar
para
dar con desencuentros oportunos
abrazos grises a granel
y zapatos nuevos para seguir andando

nadies, otra vez(es)

preguntar por nosotrxs 
en lenguas
cortas, largas
de todos los colores y sabores de la infancia

lamen nuestros nombres con lujuria
y piden a gritos nuestras carnes
para penetrarlas
para hacerlas mejores dicen
para luego venirlas pidiendo otra vez para hacernos mejores

prometen pintar nuestras uñas de colores brillantes
hacer tiesas nuestras espaldas y curvas nuestras piernas
ablandarnos todos hasta el astio
y vendernos por precios módicos en las esquinas de las ciudades que comen sus lenguas

¿habrán visto cosa igual?
maquinas de todos los tamaños
hechas con piel como la nuestra
vivas risueñas feliz de acometer agravios lisas brillantes